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la esclavitud

Esclavitud es la situación en la cual un individuo está bajo el dominio de otro, perdiendo la capacidad de disponer libremente de sí mismo.

El fenómeno de la esclavitud se remonta a las civilizaciones antiguas. Históricamente se ha demostrado que su razón de ser radica en el fortalecimiento y sostenimiento de la actividad económica, ya que normalmente los esclavos eran empleados como mano de obra, aunque hay excepciones, como los jenízaros, o cierta tribu africana que raptan algunos individuos de otras tribus y los drogan con tal decaimiento de sus funciones que sólo son usados como instrumentos sexuales, haciendo tal menoscabo de su físico aún estando bien alimentados que acaban falleciendo.

Es de notar que en la naturaleza también se da la esclavitud, como ejemplo ciertas hormigas que roban ninfas de otras razas de menor tamaño y las hacen trabajar para su provecho.

Claro es el ejemplo de la colonización de América o las prácticas del antiguo Imperio Romano además de los planteamientos políticos de la Grecia Antigua donde el mismo Aristóteles sostiene que la esclavitud es un fenómeno natural. Mintz y Elkins consideran que existe una relación recíproca entre capitalismo y esclavitud, ellos evidencian que conforme varía dinamismo del capitalismo, el carácter represivo de la actividad laboral también varía. Otros investigadores como Lester Thurow sostienen que mientras la democracia es incompatible con la esclavitud, el capitalismo no lo es, por lo que la esclavitud suele reaparecer en la misma proporción que avanza las formas autoritarias de gobierno.[1]

El Día Internacional del Recuerdo de la Trata de Esclavos y de su Abolición se celebra el 23 de agosto, mientras que el Día Internacional para la Abolición de la Esclavitud se celebra el 2 de diciembre.

También se entiende por esclavitud la condición de personas sujetas a los designios de otras sin opción a réplica, discrepancia, decisión o protesta.

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participacion en el bicentenario
Para atender.......¡¡¡
La Red de Bibliotecas del Banco de la República, con motivo del Bicentenario de la Independencia, quiere ofrecer a todos los colombianos un espacio donde se pueda leer un buen número de documentos producidos desde 1750 hasta 1850 en distintos lugares, instancias y circunstancias. Esperamos que muchos colombianos de todas las edades encuentren aquí documentación de interés para iniciar al menos las respuestas a las preguntas que quieran hacerle al pasado. Este espacio se estará construyendo desde ahora, centrándose primero en torno a 1810 y luego ampliándose hacia atrás y hacia delante y, en lo posible, profundizando. No será exhaustivo pero si esperamos que tenga una cobertura básica para las distintas regiones del país. Estarán en principio los documentos que ya estén impresos y publicados.

Entendemos el período denominado la Independencia como un tiempo fuerte, especialmente para la producción y la búsqueda de sentidos. Las referencias más frecuentes nos remiten colegios, prensa, Expedición Botánica, Biblioteca Real, Comuneros, Misiones, Reformas, tertulias, viajes, chicherías, viruelas, cabildos, juntas y conspiraciones. De ello nos quedan reales cédulas y decretos, periódicos, libelos y pasquines, pinturas, sermones, relaciones y memoriales, diarios, manuales, proyectos, mapas, discursos, juicios, proclamas, constituciones y actas. En el período emergen multitud de discursos desde distintas ciudades y pueblos, las palabras adquieren nuevos significados, se proponen nuevas legitimidades e identidades de sujetos y grupos, se rediseña el mapa de lealtades sociales, políticas y religiosas, y las tensiones cotidianas se hacen más visibles aun al interior de las familias. Hay cambios en las formas en que sesiente, se vive y se dice lo público y el orden social. Es un tiempo de invención de sujetos políticos y de sociabilidades, de nuevos medios como la prensa, y de la instauración de muchos nuevos lugares desde donde se interviene en la palestra política. Pero sobre todo un tiempo de muchas palabras y de incremento de la escritura y la lectura.

Por eso hacemos del Bicentenario una ocasión para poner a disposición de diferentes públicos lectores, un repertorio de textos e imágenes, relacionados de maneras distintas con los procesos de la independencia. Exponemos los documentos no porque creamos que ellos contengan la verdad ni lo que “realmente pasó”, sino porque son los registros contemporáneos a los que tenemos acceso. Esperamos que su lectura y análisis contribuyan a proponer nuevas preguntas por parte de distintos públicos lectores, a entender mejor la diversidad de procesos del período, sus sentidos y significados y a elaborar historias múltiples, desde distintos puntos de vista, espacios y sujetos que quizás puedan contribuir a articular una representación de nuestro pasado para el presente.